* LA REFORMA LOCAL: MÁS RECORTES SOCIALES Y MENOS "DEMOCRACIA"

LA REFORMA LOCAL: MÁS RECORTES SOCIALES Y MENOS "DEMOCRACIA"

La nueva ley que prepara el gobierno del PP para reformar las administraciones locales, va en la misma línea recortadora de derechos que el resto de políticas neoliberales que se vienen aplicando en los últimos años. Debilitar el papel de los ayuntamientos tendrá como primera consecuencia la pérdida de los servicios sociales que prestan estas administraciones públicas a los ciudadanos. En teoría, con la nueva ley de Reforma Local estos servicios pasarían a ser competencia de las comunidades autónomas. Este argumento es una trampa, puesto que esas comunidades no dispondrán de nuevas partidas presupuestarias, es decir, de dinero, para asumir los costes de dichos servicios sociales. Y mucho menos unas comunidades autónomas a las que se les está exigiendo recortes presupuestarios para reducir su déficit público.

Es más, según se desprende del nuevo Plan Presupuestario que el gobierno Rajoy ha remitido a la Unión Europea (UE), las Comunidades Autónomas tendrán que recortar 8.000 millones de euros en los próximos dos años. A los 4.068 millones de euros que las autonomías deberán recortar el año que viene, se suman otros 4.000 millones de euros que tendrán que recortar en 2015. En total serán 10.500 millones los que se recortarán en 2015, y la mitad recaerán sobre los ayuntamientos. Es decir, que las CC.AA dispondrán de menos dinero pero tendrán que asumir muchas más competencias. 

 

 

Esta cuadratura del círculo llevará a la desaparición de muchos de los servicios públicos y políticas sociales que hasta ahora se prestaban desde los ayuntamientos. El infame ministro Montoro debería explicarnos cómo es posible que, si tal y como dice el gobierno, esta reforma local no va a suponer ningún recorte en los servicios sociales ni va a suponer el despido de más trabajadores públicos, ¿cómo se van a "ahorrar" los 8.019 millones de euros que el gobierno pretende ahorrar en los próximos seis años con esta ley? Mienten sin el mayor sonrojo. Le dicen una cosa a los ciudadanos en España y al mismo tiempo le dicen la contraria a sus superiores en Bruselas.

 

Pero además de los recortes sociales y la cuestión económica, con esta reforma local se aleja todavía más - si es que se puede - la actividad política de la vida cotidiana de los ciudadanos. En un país donde la democracia brilla por su ausencia, alejar de los ciudadanos los centros de poder donde se toman las decisiones que más directamente les afectan, supone profundizar en esa falta de democracia existente y en la brecha que separa a los ciudadanos de las instituciones públicas que, supuestamente, dicen representarles. En unos momentos en los que necesitamos más organización popular y más participación política desde la base, el gobierno ataca a la institución más cercana a los ciudadanos y en la que aún podían tener - aunque muy poca - alguna capacidad de presión sobre las decisiones que allí se toman.

 

La secuencia que nos queda es la siguiente: los ciudadanos no podremos llevar nuestras propuestas o ejercer nuestro derecho a la protesta frente a los ayuntamientos, puesto que las decisiones se toman desde las CC.AA. Pero tampoco podremos protestar frente a las CC.AA porque las decisiones se toman desde el Estado central. Pero además será inútil viajar cientos de kilómetros para protestar frente al gobierno central en Madrid, puesto que las decisiones se toman en Europa. Y ni siquiera podremos viajar a Bruselas, puesto que en realidad las decisiones sobre nuestro país se toman en La City de Londres o en Wall Street, entre otros lugares.

 

Entonces ¿qué espacio nos dejan a los ciudadanos para ejercer nuestros derechos, para el ejercicio de lo que las élites llaman "democracia"? Ninguno, de eso se trata en el fondo, de que el Pueblo, como decía el criminal Franco, no se meta en política. Nunca hubo una verdadera democracia política en España, ni una democracia económica, ni mucho menos una democracia participativa; y con esta reforma local, además de causar más daño a los ciudadanos más vulnerables, se profundiza aún más en esa falta de democracia ya existente.   

 

 

Publicado por ADOLFO FERRERA MARTÍNEZ